¿Qué es la vida sin recuerdos?
Apareció el boliche que me había recomendado tantas veces mi hermana y que nunca había logrado llegar a el.
Apareció el localcito de tacos, ese con mesitas de kindergarden y que tanto me gustó. Recordé una noche, unos tacos.
Cinco pasos más y seguí mirando a la gente.
Otros cinco pasos y recordé el colegio, el departamento de mi amigo que siempre me gustó y nunca se lo dije.
¿Qué es la vida sin recuerdos?
Seguí caminando y veia como la gente iba a sus destinos, unos alegres otros tristes cada uno ensimismado en su propio mundo.
Había caminado un buen trecho, cuando me encontré frente al gimnasio que vio mi primera curadera, estaba en segundo lo recuerdo, esa noche estaba nerviosa, el gimnasio se iluminaba, aún recuerdo como si fuera ayer cuando entré a el y vi a mucha gente, todos bailando, mucha gente que nunca había visto en mi vida, no se por qué estaba nerviosa, supongo que algo de nervios porque no me sacaran a bailar... pero fue lo contrario, baile mucho y fumé mucho esa noche, la primera vez para ser tanto, siendo que era pendeja. Y recuerdo las luces y las vueltas y las risas, y qué en verdad me embragié del humo, de las vueltas más que del copete.
¿Qué es la vida sin recuerdos?
Otro pasos para encontrarme con la otra cara de la realidad, la pena, el ataúd, la cara de la Pancha llorando, todos mis compañeros estupefactos, tratando de reaccionar, de entender que él no volvería más. No volveré a entrar a esa iglesia, el recuerdo de su cara, destruida, de su cabeza envueltas en vendas, no, esa imagen no se va.
¿Qué es la vida sin recuerdos?
Crucé la calle, y me di cuenta que mi pinta de intelectual al peo, a pesar de mis pocos kilos, marca y no paso desapercibida con mi pelo suelto y el libro bajo el brazo.
¿Qué es la vida sin recuerdos?
Recuerdo esa calurosa tarde ahora, porque la pileta está funcionando y siento que mis mejillas están rojas de vergüenza, aunque sean mis mejores amigos, algo me reprime a besar a mi primer pololo en la calle. Y desaparece esa imagen y ahora también siento que es primavera, que una ráfaga de viento levanta mi falda y me atormento porque se vió mi ropa interior y atrás iban otros colegiales.
Entro al vagón del metro y me pregunto:
¿Qué es la vida sin recuerdos?